martes, 10 de julio de 2012


Carolina Panthers




Record 2011: 6-10.

Quien se fue: Dan Connor, LB, Legedu Nanee, Wr.

Quien llego: Mike Tolbert, Rb, Mike Pollack, OG, Luke Kuechly, LB via draft.

Fortaleza: ataque terrestre, la versatilidad de Cam Newton.

Debilidad: su defensiva terrestre fue de papel, la poca profundidad en la posición de Wr, defensiva aérea.



Como lucen: después de una extraordinaria temporada debut para Cam Newton, no queda ninguna duda que los Panthers deben trabajar horas extras en su defensiva. Aunque la ofensiva terrestre fue la 3ª mejor de la liga, es una señal de preocupación de que casi el 30% de ellas provienen de su Qb titular. Es por esa razón que muy probablemente hayan contratado al ex-Charger Mike Tolbert, especialista en situaciones de corto yardaje, que le da más armas a una ofensiva que luce bastante prolífica en lo que se refiere al ataque terrestre. Y además, sin duda, será un alivio para Carolina no ver a Newton anotando tantos touchdowns por tierra. Lo menos que quieres ver, es arriesgar tanto al jugador que es la cara de la franquicia. Por aire, la resurrección de Steve Smith le da un blanco confiable a Newton, sin embargo, detrás de el no hay un claro Wr no 2. Greg Olsen es un gran TE, pero no fue involucrado tanto en el plan de juego aéreo. Situación que puede cambiar esta temporada ante la salida de Nanee, el 2º mejor receptor del equipo. Es muy probable que Newton muestre una pequeña regresión con relación a la temporada pasada, ahora que los equipos ya tienen partidos de el para analizarlo. Igualmente, todo parece indicar que Newton ha despejado cualquier duda que había con su adaptación a la NFL. Olvidémonos por un momento de los records para una temporada de novato que rompió. Su mejor carta de presentación es su porcentaje de pase completos, del 60%. Y a eso agreguemos que es un Qb al más puro estilo Roethlisberger. Es un tipo demasiado difícil de taclear, y que ha demostrado tener la puntería necesaria para ser un Qb titular en esta liga. Así que al parecer, la ofensiva, a pesar de contar con un limitado cuerpo de receptores, podría mantenerse en la estela de la temporada pasada.

Los problemas empezaron con la defensiva. Cuando esta permite 26 puntos por partido, es complicado tener record ganador, por no decir que imposible. ¿por donde empezamos? El corazón de la línea defensiva carece de talento destacado en la posición de DT. Y además, la lesión de Jon Beason, LB, los dejo sin una presencia de peso en el corazón de su defensiva terrestre. Sin embargo, y a pesar de la salida de Dan Connor, me parece que su defensiva terrestre mejorará con relación a la temporada pasada. Mi principal argumento es la llegada del novato Luke Kuechly, LB, vía draft. El chico fue una maquina de tacleo en Boston College, y es un jugador del tipo de Zach Thomas, chaparro, pero con muy buenos instintos para llegar al balón. Eso, y el regreso de la lista de lesionados de Beason, sin duda son buenas noticias para su defensiva terrestre. Sin embargo, el problema viene cuando uno voltea a ver la defensiva aérea. Tuvieron 31 sacks, cifra que no espanta demasiado. El líder en capturas del equipo fue Charles Johnson, con 9, cifra que no es nada del otro mundo. Y mejor ni voltear a ver a los Cb’s, posición en la que no hay demasiado talento. Haber sido la no 24 por aire, y conseguir tan solo 14 intercepciones, hablan por si solos. Esperan que la llegada de los Safeties Haruki Nakamura, ex Baltimore, y Reggie Smith, ex San Francisco, los ayuden en algo.

Ron Rivera tiene mucho trabajo por delante, sobre todo en el área de su especialidad, la defensiva, y aunque tendrán un calendario muy complicado, por lo duro de su división en especial, el regreso de varios de sus lesionados, como Beason y Otah, y una ofensiva que luce potente por tierra, los podría mantener rondando el .500 de victorias en la temporada, y con un poco de suerte y un par de victorias fuera de presupuesto, estar en la puerta de playoffs. Pero no este año, este, la división le pertenece a otro. Sin embargo, ojo con los Panthers, un par de buenos drafts, y aquí se estará cocinando algo grande.

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